Hoy os traigo una receta de esas que me gusta preparar con ingredientes peculiares. Este plato de salmón está preparado con una salsa cuya base es Té Lapsang Souchong. Este té es originario de China y se cultiva a una altura de entre 3.500 Y 5.000 metros. Se cultiva en la región de Zheng Changy es un té negro con un intenso aroma ahumado. Cuentan que durante una época de guerras la producción de té y el secado de hojas fue interrumpido por un largo periodo de tiempo. Después de este periodo, hubo una gran demanda y para acelerar el proceso de secado pusieron el té encima de fuego hecho con madera de pino o abeto. Esto hizo que adquiriera ese aroma a humo y madera que lo caracteriza y lo hace tan especial.
Mi experiencia con este té fue de sorpresa inicial a entusiasmo por utilizarlo. Gracias a Café Té Arte, que tiene unos productos extraordinarios, he podido probarlo y experimentar con él.
Os cuento detalladamente mis experiencias. Cuando abres el paquete lo primero que se percibe es un fuerte aroma a humo, muy intenso y un delicioso aroma a té de fondo. Una vez que lo dejas infusionar, tan solo 4 minutos, el aroma a humo es más tenue y el aroma a té crece. La infusión toma color rojizo oscuro y al paladar, el humo desaparece por completo y sólo se paladea un delicioso té negro de gran calidad. Mientras que por el olfato se sigue percibiendo el aroma ahumado, por el paladar no se aprecia en absoluto, por lo que el disfrute es perfecto.
Como no podía quedarme ahí me decidí a cocinar con él y, como Miguel es un gran aficionado al té, unimos neuronas y elaboramos una receta muy sencilla que permitiera poder sacar partido a este producto también en un plato.
Vamos a por ella:
Ingredientes (para 4 comensales):
- 4 filetes de lomo de salmón fresco.
- 200 ml. de té Lapsang Souchong (infusionado 6 minutos).
- 200 ml. de nata para cocinar.
- ½ cebolla.
- 1 cucharadita de mantequilla.
- Aceite de oliva, sal, pimienta blanca, nuez moscada y eneldo.
La receta de hoy combina tres ingredientes muy recomendables para nuestra salud, puesto que nos aportan muchos elementos beneficiosos.
Por un lado tenemos el salmón, con un alto contenido en proteínas y ácidos grasos omega-3, que contribuyen a disminuir los niveles de colesterol y triglicéridos y aumentan la fluidez de la sangre, previniendo coágulos y trombos.
Por otro lado el aguacate, con alto contenido en aceites vegetales, es antioxidante y rico en vitaminas A, B1, B2, B3, E, proteínas y minerales.
Y por último, y no menos importante, la naranja, rica en vitamina C, flavonoides y aceites esenciales.
Bien, después de todo esto, si os digo que la receta es muy sencilla de preparar, que os robará muy poco tiempo y que el resultado es delicioso…imposible resistirse ¿verdad?
Ingredientes (para 2 comensales):
- 2 rodajas de salmón fresco.
- 1 aguacate.
- 1 naranja.
- ½ limón.
- Aceite de oliva, sal, pimienta y cilantro (o perejil).
Esta es una de esas recetas que yo denomino coloquialmente “de capricho”. La lees e inmediatamente sabes que tienes que hacerla, que te va a gustar y además no te equivocas. Una delicia al paladar, incluso Miguel, que no es un fan del salmón, quedó encantado y me comentó que tenemos que repetirla.
No tiene ninguna complicación a la hora de hacerla y no os robará mucho tiempo. Si tenéis invitados les dejaréis muy impresionados. La receta original, del blog Cogollos de Agua, utiliza lomos, yo compré un filete grande de la parte de la cola y tuvimos para los dos. También hice alguna variación en la mezcla de especias. Os dejo ingredientes para dos raciones.
Ingredientes:
- 500 gr. de salmón fresco.
- 2 cucharadas soperas de mermelada de naranja amarga.
- 2 cucharadas soperas de vino blanco.
- 1 cucharada sopera de mostaza de Dijon.
- 1 cucharadita de miel (yo utilicé miel de encina).
- ½ cucharadita de jengibre en polvo.
- 1 diente de ajo.
- 1 cebolla pequeña.
- Almendras fileteadas.
- Aceite de oliva, sal y pimienta.
Una receta de esas que cuando las encuentras no paras hasta que la haces, una pinta estupenda, completa, puede servir como plato único sin problema puesto que tiene de todo: verdura, proteína e hidratos. Es de origen ruso y en casa gustó mucho, la acompañamos con una salsa hecha con nata caliente, sal, pimienta y zumo de limón. Como sobró una porción la comimos con salsa de yogur de la que ya venden hecha y el resultado también es estupendo. Os animo a prepararla, lleva un tiempo pero es muy fácil.
Ingredientes:
- 2 láminas de hojaldre (yo uso el congelado de Hacendado).
- 500 gr. de salmón fresco.
- 200 gr. de arroz.
- 400 gr. de espinacas congeladas.
- 3 huevos.
- 2 dientes de ajo.
- Aceite, sal, pimienta y estragón.