Esta receta se la enseñaron a Miguel unos franceses, ellos los preparaban así de forma habitual en sus casas. Quizá no sea el nombre que deba tener la receta, así que espero que los más “puristas” no se escandalicen. Así los llamamos en casa.

Aclarado esto debo hablaros un poco de las bondades de los guisantes. Estas leguminosas nos aportan mucha Vitamina A, minerales como el Fósforo, Potasio, Calcio y Hierro así como Riboflavina y Tianina. Son buenos para el colesterol, el esfuerzo físico, la inapetencia, el sistema nervioso y el insomnio gracias a su poder tranquilizante y además nos aportan fibra.

Creo que merece la pena consumir guisantes, ya sean en grano o con vaina, llamados tirabeques.

La receta que os traigo es muy sencilla y llena de sabor. Nosotros solemos tomarla como plato único en la cena, es un plato completo y lleno de nutrientes.

Ingredientes (para 4 comensales):

• 1 Kg. de guisantes congelados.
• 150 gr. de bacon en tiritas.
• 1 cebolla.
• 50 gr. de mantequilla.
• 1 cucharada de harina.
• 300 ml. de caldo de cocción de los guisantes.
• 1 cucharadita de pimienta blanca molida.
• Sal.

Elaboración:

Lo primero es cocer los guisantes en agua con sal hasta que estén al dente. Escurrimos SIN tirar el caldo y reservamos.

En una sartén ponemos un poco de mantequilla y rehogamos la cebolla cortada en tiritas finas hasta que cambie de color.

Añadimos el bacon y una cucharadita de pimienta blanca molida. Rehogamos hasta que el bacon esté un poco hecho.

Añadimos los guisantes escurridos a la sartén y rehogamos. Echamos el harina, mezclamos bien para que el harina se dore un poco y añadimos el caldo de cocción de los guisantes.

Mezclamos y dejamos hacer todo junto hasta que la salsa se espese un poco. Probamos, ajustamos de sal si es necesario, retiramos y servimos recién hechos.

Deliciosos, la pimienta les aporta un sabor increíble.

Un plato perfecto y completo.